El matrimonio se vincula con un menor riesgo de enfermedad cardiovascular

La investigación ya ha demostrado que las personas casadas generalmente tienen un riesgo menor de enfermedad cardíaca en comparación con los solteros, pero un nuevo estudio encontró que también hay una ventaja cardiovascular.

Los registros médicos de más de 3,5 millones de estadounidenses se analizaron como parte de un estudio de la Universidad de Nueva York, y cada sujeto se evaluó para detectar enfermedades cardíacas y problemas de circulación en las extremidades.

«Descubrimos que estar casado se asoció con menores riesgos de enfermedad cardiovascular en general», dijo el investigador del estudio, el Dr. Carlos Alviar, miembro de cardiología del Centro Médico Langone de la NYU.

En la investigación también se siguieron varios factores comunes a quienes padecen enfermedades cardíacas, desde el tabaquismo y el peso corporal hasta la presión arterial alta y la diabetes tipo 2.

El estudio agrega las cifras más grandes hasta ahora al creciente consenso entre los investigadores de que el matrimonio es un estilo de vida más saludable, al menos estadísticamente.

Una diferencia que distingue a esta investigación de muchos estudios anteriores es la falta de diferencia observada entre los géneros. Por lo general, las mujeres casadas experimentan menos beneficios para la salud al estar casadas que sus cónyuges. En este informe no se notó tal diferencia.

«Los hombres y mujeres casados tienen el 5 por ciento

menos posibilidades de enfermedad vascular «.

Algunos hombres, sugiere el estudio, son persuadidos por sus esposas para que quizás asistan a más citas médicas de las que de otro modo harían. Ésta y otras características del matrimonio pueden estar desempeñando un papel práctico en los resultados.

«Quizás las personas casadas se cuiden unas a otras», dijo el Dr. J. Jeffrey Marshall, quien revisó el estudio. «Pueden hacer ejercicio juntos. Su cónyuge puede ayudarlo a controlar su dieta».

De los historiales médicos revisados, alrededor del 70 por ciento de los sujetos estaban casados, y una división casi pareja del resto eran divorciados, solteros o viudos. Las edades oscilaron entre 21 y 102 años.

Según Alvair, los hombres y mujeres casados tienen alrededor de un 5 por ciento menos de probabilidades de sufrir una enfermedad vascular en general en comparación con los solteros.

«Los hombres y mujeres viudos tenían un 3 por ciento más de probabilidades, y los hombres y mujeres divorciados tenían un 5 por ciento más de probabilidades de sufrir una enfermedad vascular», dijo.

Alviar presentó sus hallazgos en el American College of Cardiology.